Mi Pareja Se Quiere Divorciar: Lo Que Debes y No Debes Hacer Si Quieres Revertir la Situación

Tu pareja se quiere divorciar? Ya sea que parezca de la nada o que lo hayas estado sintiendo durante mucho tiempo, da miedo escuchar a tu cónyuge decir: “Quiero el divorcio”. Puedes estar preparado para hacer cualquier cosa para salvar el matrimonio, incluida la terapia. Pero tu cónyuge puede estar diciendo: “Ya me harté”.

Si realmente quieres evitar el divorcio, debes demostrar que eres capaz de un cambio real. Piensa profundamente en lo que los ha llevado a ambos hasta este lugar. ¿Qué comportamientos estás dispuesto a cambiar para encaminar tu matrimonio? Piensa en lo que probablemente tu cónyuge se ha estado quejando durante mucho tiempo. ¿Qué te has negado a escuchar?

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Puede parecer injusto que tengas que hacer todo el cambio. Por ahora, sí, lo más probable es que debas hacerlo porque estás en desventaja. Primero debes cambiar. Pero recuerda, no se acaba hasta que se acaba. Incluso los cónyuges que dicen que quieren divorciarse suelen mostrarse algo dudosos al hacerlo. Eso significa que hay esperanza.

Si tu pareja quiere divorciarse porque tienes una adicción (pornografía, sustancias u otra), tuviste una aventura o muestras comportamiento abusivo, debes obtener tu propio tratamiento para corregir todo esto. Tendrás un largo camino por delante para reparar el daño que has causado.

Qué no hacer si tu cónyuge quiere divorciarse

Quieres la mejor oportunidad para salvar tu matrimonio. Muchas personas sabotean este resultado actuando desesperadas, enojadas, desagradables o vengativas. Esto es lo contrario de lo que deberías estar haciendo. Estas acciones pueden dificultar el logro de tu objetivo de salvar el matrimonio, así que esfuérzate por evitarlas.

  • Actuar: Comportamientos como consumir drogas, alcohol, quedar atrapado en la escena del bar y coquetear (o más) con otras personas no te ayudará a resolver las cosas con tu cónyuge a largo plazo.
  • Rogar: Suplicar, perseguir o presionar a tu cónyuge puede tener el efecto contrario y alejarlo.
  • Comprar: Comprar regalos, flores y tarjetas para compensar o disculparse por lo que pudiste haber hecho y que llevó a tu pareja a querer el divorcio probablemente no resolverá los problemas reales. No tendrás éxito en recomprar el amor.
  • Chismes: Pedirle a familiares o amigos que alienten a tu cónyuge a quedarse contigo puede empeorar las cosas. Hablar de estos asuntos personales con estas personas puede molestar a tu pareja.
  • Idealizar: Abstente de señalar todas las cosas buenas del matrimonio o de ti.
  • Manipular: Decir “te amo” o pedirle a tu cónyuge que lea libros sobre el amor y el matrimonio podría parecer manipulador o agresivo.
  • Acosar: Evita hacer llamadas telefónicas excesivas y enviar muchos mensajes de texto a tu cónyuge, especialmente si este no ha sido tu patrón antes de la reciente ruptura. Abstente de actuar con desesperación o urgencia.
  • Dar lástima: Puedes sentirte abrumado por la tristeza y solo puedes expresar este sentimiento hacia tu cónyuge, pero haz todo lo posible para no dar lástima hacia tu pareja.
  • Recordar: No intentes que tu cónyuge mire las fotos de su boda, hable sobre sus primeros días de citas, etc.
  • Espiar: Seguir a tu pareja en tu automóvil, revisar sus correos electrónicos, teléfonos celulares y facturas, etc., puede romper la confianza en su relación.

Qué hacer si tu cónyuge quiere divorciarse

Prueba estos pasos proactivos para reparar tu ruptura y ayudar a tu pareja a cambiar de opinión sobre el divorcio. En última instancia, el objetivo no es solo evitar el divorcio, sino mejorar la salud de su relación.

  • Actúa como si fueras a avanzar con confianza. Comprométete a hacer esto sin importar si tu cónyuge se queda o no contigo.
  • Permite que tu pareja se acerque a ti con preguntas o inquietudes. Hazle saber sinceramente a tu pareja que deseas salvar el matrimonio y luego sé paciente con cualquier discusión sobre el tema. Durante cualquier discusión, sé un oyente activo y comprometido.
  • Se tu mejor versión. Este no es el momento de desmoronarse, enfurecerse o vengarse. Reúne la mejor actitud que puedas.
  • Compórtate respetuosamente con tu cónyuge. Ten también respeto por tu persona.
  • No participes en discusiones. No muerdas el anzuelo si tu cónyuge intenta que discutan. Incluso puede que tengas que alejarte. (Si tu cónyuge afirma que “siempre te alejas”, dile que estarías feliz de quedarte y tener una conversación civilizada. Entonces hazlo).
  • Consigue ayuda. Lee libros de autoayuda o superación personal o consulta a un consejero matrimonial.
  • Dale a tu cónyuge algo de espacio. No le preguntes sobre dónde estuvo o su horario.
  • Mantente haciendo algo. Continúa con tus actividades diarias y tal vez incluso agrega algunas nuevas: sal con amigos, familiares y tus hijos. Visita un lugar de culto, prueba un nuevo pasatiempo, haz algo de ejercicio. Sigue viviendo, a pesar de lo que pase con tu matrimonio. Puedes invitar a tu cónyuge a unirse a ti, pero no reacciones negativamente si se niega. No cambies tus planes previstos.
  • Mantente al día con tu apariencia. Es posible que te sientas muy triste y mal contigo, pero ignorar la higiene básica empeorará la situación (además de ser poco atractivo para tu cónyuge).
  • Deja que tu pareja te vea feliz. Tu estado de ánimo fluctuará, pero encuentra una salida para los sentimientos difíciles que no sea tu cónyuge. A menudo, se trata de un terapeuta o consejero.

Cómo manejar los siguientes pasos

Quizás te estés preguntando cuál es la mejor manera de proceder. Hay algunos pasos inmediatos que podrías considerar si tú y tu cónyuge han discutido la posibilidad de divorciarse.

  • Prueba la terapia de pareja: Averigua si tu cónyuge tendría disposición de acudir a la terapia de pareja contigo para identificar y resolver los problemas de su relación. Esto podría ayudarte a comprender si hay una manera de avanzar juntos y reconciliar lo que está causando una ruptura.
  • Consulta a un abogado: Puede ser una buena idea hablar con un abogado para ver qué implicaciones de un divorcio podría significar para ti desde una perspectiva legal.

Mantenerse mentalmente fuerte

Pasar por un divorcio o considerarlo puede ser emocionalmente angustioso. Recuerda practicar el cuidado personal, como la meditación y busca apoyo. Puedes considerar ver a un terapeuta por tu cuenta o unirte a un grupo de apoyo.

Hacer cambios positivos, independientemente de si tu matrimonio finalmente funciona o no, siempre es una buena idea. Es probable que tengas algunos comportamientos o rasgos que serían problemáticos en la mayoría de las relaciones. Trabajar a través de ellos ayudará a mejorar tu capacidad para conectarte y comunicarte con una pareja romántica (ya sea tu cónyuge actual o alguien nuevo).

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